La excelente organización estuvo a cargo del Centro de Desarrollo Agropecuario (CEDESA), en cuyas instala-ciones se hospedaron buena parte de los asistentes, apoyados por la Red Tláloc y otras organizaciones de economía solidaria.
Del 5 al 7 de agosto, se reunieron en Dolores Hidalgo, Guanajuato, cerca de 500 productores de 16 estados del país. Se trataba de la 12ª Feria Nacional de Productores y Consumidores "Lucha Rivera", donde se vendieron e intercambiaron diversos servicios y artículos elaborados por pro-ductores mexicanos. Alimentos orgánicos y procesados, comida regional, medicina natu-ral, muebles, libros, arte, cultura, ropa y artesanías de todo tipo fueron expuestos por dis-tintas cooperativas y organizaciones civiles.
Entre ellos, más de 200 tianguistas utilizaron la moneda comunitaria o vale llamado Mezquite, el cual sólo se usa en estas ferias anuales para el intercambio de bienes y servicios, acordando que fuese aceptado en al menos un 20% de cada compra-venta.
Para ello se ocupó toda la Alameda, sien-do el kiosko el eje de algunas operaciones, donde acudían grupos de 20 productores a recibir capacita-ción sobre el uso del Mezquite. Al final entregaron los vales utilizados, con el fin de contabilizar el intercambio gracias al sistema de endosos o firmas: alrededor de 10 mil pesos en Mezquites circularon en esta feria.
Durante toda la feria se realizaron foros y activida-des culturales en una gran carpa. El domingo participó el Mercado Alternativo, de Espinal, Ver., exponiendo el Túmin como instrumento de intercambio.
El sábado por la tarde, una tremenda granizada no desanimó a los participantes pues pronto se reinstala-ron. Y el domingo, un grupo de la Red Tláloc hizo un recorrido festivo por toda la feria, a manera de carnaval con sombreros, máscaras, silbatos, globos y aparato de sonido, lanzando entusiasmo y portando camisetas que decían al frente "Mas Mezquites", y por atrás "Menos Pesos", sintetizando un objetivo importante de esta feria: avanzar en la autonomía económica mediante la solidaridad, para liberarnos poco a poco de la dependencia del peso como instrumento de dominación capi-talista. Ahora todos dejábamos de ser clientes y nos convertíamos en compañeros, aceptando lo más posi-ble de Mezquites y ofreciéndonos mejores precios.
Así, pese a la desnutrición económica que agobia a la mayoría siendo el dinero engullido por transnacionales, por grandes empresarios y altos funcionarios públicos, las mercancías comenzaron a circular entre los productores gracias al apoyo del Mezquite; así se facilitó el truque y se compartieron mercancías.
Fuente: KGOSNI no. 86
